Política actual, una “empresa” que derrumba al país

Un municipio que con cada administración va perdiendo la batalla. Los que en años anteriores fueran llamados los gamonales del pueblo, quienes se peleaban entre ellos, haciendo campañas políticas hablando mal el uno del otro, ahora se han unido a uno que de gamonal no tenía nada, pero ahora lo tiene todo.

Por: Norma Bibiana Leaño Quijano

Tiene tanto que ha logrado que la mayoría de los que han aspirado a ser alcaldes o lo han sido, lo rodean para garantizar su continuidad en el poder, con los votos que deben conseguirle  quienes forman parte de su empresa política, subsidiada por los que una vez suplida su necesidad de empleo, deciden apoyarlo, incluso algunos, por no decir la mayoría, contribuyen voluntariamente con un porcentaje de sus honorarios y se comprometen con asegurar mínimo hasta diez votos de sus amigos y familiares, consolidando una “empresa” que no deja progresar el municipio ni el país, hasta los entes de control los tiene permeados.

Algunos cercanos al líder político han abandonado el país, pidiendo refugio y alejándose, quizá por miedo a estar involucrados en posibles irregularidades,  en política no se sabe cuándo se puede caer o estar involucrados en acciones irregulares. El poder enceguece.

Por ésta y cientos de razones más,  no hay quien escuche seriamente el clamor de un pueblo, que necesita seguridad, vías, salud, educación, infraestructura en acueducto y alcantarillado; fortalecimiento en las instituciones educativas, laboratorios, pupitres, infraestructura, tecnología y hasta docentes.

Ausencia de compromiso de propios y de quienes han ido a buscar votos, para perpetuarse en sus curules. Sin olvidar que hubo algunos recursos que no fueron aceptados por administraciones anteriores, por el simple hecho de no haber sido gestionados por su amigo, o jefe político, como ellos mismos lo argumentan.

Dicen que la corrupción gobierna el país, ¡no señor, el país lo gobierna usted! Pilatos al orden del día, mi candidato es bueno, “me mantiene trabajando” sino es en la alcaldía, busca espacio en la gobernación, en la cámara de comercio, en el hospital, en la universidad, en el SENA, en fin, en las instituciones en las que tiene incidencia y poder.

Entonces lo cierto aquí es que los que llegan al poder no lo representan a usted, solo a unos pocos,  pero dominan al resto. Usted es el que al fin de cuentas tiene que soportar la pelea de egos; dado que se hicieron a merced de otros que utilizan títeres, para del erario público disponer, hacer que los amigos de toda la vida se peleen. En definitiva, divide y reinarás. Es tiempo de pensar no solo en usted y su familia, es tiempo de pensar en común y en el bienestar colectivo.

En estos momentos van por todo lo que es del pueblo, sean de la línea que sean seguirán cobrando impuestos que usted debe pagar, trabaje o no, si quiere un subsidio tendrá que ser amigo del que manipula las bases de datos del Sisben, por lo tanto debe ser amigo del político de turno que viene siendo el de siempre desde que la Registraduría lo decide, como dice “Juampis”, entonces se dará cuenta que al no ser así, estará perdido y le tocará trabajar en lo que sea y por lo que sea, el hambre no perdona,  el arriendo y los servicios no dan espera, herramientas sutiles que son aprovechadas por su llamado amigo, del momento político de turno.

 “Su voz”, “por el pueblo y para el pueblo”, otras frases que se tornan sonoras, salvadoras y creadoras de historias fantásticas, que convencen hasta al más leído, el mejor hablado, el intelectual, el docente, el médico, el ingeniero, el arquitecto, el trabajador social, el que mira los toros desde las barreras, el que está en primera línea, el que dice que si puede ordenar que se hagan más billetes para erradicar la pobreza, y que se ayudará con los impuestos que le cobrará a los de los estratos altos, como si fueran muchos, desconociendo que malos o buenos son los que le dan empleo a la mayoría de los colombianos.  Todos soñadores, todos emprendedores políticos, todos embaucadores de conciencias.

Cuidemos nuestro país, tantas cosas que nos dicen de los países desarrollados no son ciertas, pagan impuestos por todo, la salud no es gratis, no hay viviendas de interés social, en fin se trabaja, se vuelve a estudiar, se vuelve a nacer, se aterriza.

Hasta para los hijos, familiares y hermanos de algunos políticos es igual, todos valemos igual, todos tenemos las mismas oportunidades, aquí no vale el que tu papá sea presidente o escobita, vales por ser humano, el resto lo ganas según el nuevo proyecto de vida que tengas. Amo la tierra en que nací como dice Juanes, es única, tiene todo, estamos dejando que se pierda poco a poco, analicemos antes de votar.